Una vez que la temporada ha terminado es tiempo de preparar el barco para almacenarlo correctamente y que el mismo se encuentre en perfectas condiciones durante el invierno.
En primer lugar, es el momento ideal para armar una lista con los desperfectos o arreglos a realizar para la siguiente temporada, ya que además de esta forma disponemos de todo el invierno para conseguir los repuestos. Es conveniente reparar cualquier daño debido a que durante el almacenamiento las grietas pueden empeorar aún más.
Otro punto a tener en cuenta con respecto a los arreglos o cambios que deseemos realizar en el barco, es el seguro de cobertura del mismo. Es necesario verificar si realizamos un trabajo de restauración o reparación, si el mismo está incluido dentro del seguro del barco.
El paso siguiente es realizar una limpieza a fondo de la cubierta y el casco del barco para eliminar cualquier suciedad que pueda causar problemas, y limpiar cualquier material que pueda provocar moho durante el invierno.
En cuanto a las amarras se debe instalar muelles metálicos o amortiguadores de goma para evitar un posible desgaste causado por alguna fricción. También dependiendo del material de su embarcación se deben tomar las medidas necesarias. Si el mismo está hecho con casco de fibra de vidrio lo más probable es que no sufra ninguna complicación. Por el contrario, los cascos de madera tradicionales no deben permanecer una larga temporada fuera del agua.
Para asegurar que el motor y combustible no sufran inconvenientes, lo mejor es contratar un experto que lo guíe durante el proceso. Es aconsejable cambiar el aceite del motor y sustituir todos los filtros así como también revisar mangueras y correas, entre otras actividades.
Las baterías por su parte, deben estar desconectadas del circuito general del barco y cargadas al máximo, ya que aunque no se utilice la embarcación las mismas se descargan lentamente por sí solas. Este procedimiento debe hacerse con cualquier aparto electrónico para no correr riesgo que se sulfaten los circuitos.
Una buena idea para los tanques de agua y calentadores, es añadirles un anticongelante no tóxico, especialmente si su embarcación se encuentra en una zona donde el invierno azota fuerte.
Por último, verificar la seguridad de su embarcación. Este punto debe ser dividido en dos. Por un lado debemos comprobar elementos tales como botiquín, balsa salvavidas o materiales pirotécnicos. Este es el momento perfecto para detectar si alguno de ellos está vencido o necesita ser reemplazado.
Luego tenemos que asegurarnos donde dejaremos la embarcación. Dependiendo donde se encuentre nuestro barco, podemos encontrar empresas que ofrezcan vigilancia las 24 hs. del día. Por ejemplo, en la bahía de Palma de Mallorca existen lugares para invernaje de barcos donde ofrecen seguro de cobertura de responsabilidad civil.
Es cierto que la preparación para almacenamiento de un barco puede resultar tediosa, pero también puede ahorrarnos problemas a futuro, especialmente relacionado a los costos ya que dependiendo del seguro podríamos no tener cobertura para ciertos daños.
Por esto mismo, os recomendamos seguir estas indicaciones y de ser posible, asesorarse con un especialista. De esta forma, una vez acabado el invierno, podrá disfrutar nuevamente de su barco y sin problema alguno.